viernes, 26 de febrero de 2010

El día del pelo sucio

Llevaba poco tiempo en casa, y la verdad, tenía prisa esa mañana, pero era jueves y pense que no pasaría nada si no me lavaba el pelo por segundo día, así que podría lavarmelo esa noche si salía y si no en la ducha del día siguiente.
Con tanto frio lo mejor es una ducha de galleta, mojarse y salir!
Como las cosas tienen que ser, al llevar poco en tu ciudad tus amigos te llaman por teléfono o se ponen contigo en contacto por fbok, sms, o msn... la cosa es que por cualquier medio abreviado deben preguntarte por dónde andas, y por qué no quedamos esa noche!
Jo Aniki te echaba de menos, así que sin pensarlo dos veces quedé contigo para un tetecito, la pobreza hizo que quedaramos para dar una vuelta por mi pueblo, y tu que eres más mona que un rayo de sol en invierno apareciste rauda y veloz en mi puerta, y yo con un jersey de lana lleno de bolas y el pelo sucio que parecía una congregación de olivas que queriendo o no por ser tantas acaban espachurradas unas contra otras soltando... aceite.
Bueno mi flequillo brillaba al viento pero para ir al monte que más da. Si mi vida hubiera sido un musical habría sonado música muy castiza, cuando aparecí ante Niki que muy educada nunca me habría dicho nada ofensivo, es más importante el cotilleo.... está claro.
Nos pusimos al día en nuestras vidas, y saludamos a uno y mil ciclistas de montaña, que educada es la gente en la montaña, y que bien van con sus pantaloncitos ajustados...
Me puse a hacer como que calentaba, no sea que pareciera una antideportista.
Pero bueno, se nos hizo tarde, y yo sin saber nada de Noemi que aún estaba por el monte acabé en el coche de Ana hacia su casa para que se pusiera guapa para salir. De allí a la cena de su amiga Cristina, ellas dos son unas "disfrutonas" y por tanto sus amigos muy divertidos, hablamos de muchas cosas y fue una cena de esas que salen en pelis que si no son de Woody Allen lo intentan (dime tú como intenta un director ser otro... pero sí) y había vino bueno, y copas, y una cena que dejaba mucho buen gustillo en el gaznate. Y unas tonterías que pude soltar! Yo había merendado lentejas pero por compromiso, que si no al día siguiente se hacían malas (cuales gremlins en una noche con lluvia) y te comen ellas... Así que luego cené por gusto ya que estaba a una mesa... más mona, más lista que mi mesa incluso.
de ahí y bien calientes pese al frío nos fuimos de parranda, y encontré a todo el mundo que no quieres ver con el pelo sucio. Pero me dije:bah, si no quiero ligar, que les jodan! y estuve bailando con un amigo de la escuela de arte y sus amigos, luego en el musik vino Manu, como te echaba de menos jodio, acompañado por mi ex (el tontico) que hemos hecho como una especie de inmaduro pacto por sms en el cual nos podemos ver sin vomitar, pero nada más.
Y luego vi a David de la Escuela, pero nada más, si te parece poco, pues te jodes, no romperas el corazón de "una pelo sucio".
Esa noche llegamos a las 7 a casa de Noemi, q sí, que se había añadido al grupo después de que la rescatara de las garras de mi ex y los amigos comunes (sobretodo es un grupo en el que priman los despechados, lo que hace su gracia no te diré que no).
Jo que día más chulo, con mi jersey feo que abrigaba, pero tenía bolillas, y mi pelo sucio, y mi cara lavada... que Gran Noche!!!!!!
Os lo recomiendo, por favor, salir un día sin preocuparos de Nada Más que Bailar y Ver Amigo:s.

PD: El pequeño incidente del zumo.
Como sabeis yo era feliz por vinico que Baco y la amiga de Aniki habían puesto en la mesa, así que luego al ver a mi hermana de fiesta (ella entró al baño y nos vimos, SÍ ví a todo e mundo, ¿veis?) le pedí que me invitara a un zumo de piña, soy muy pobre fijaos.... bueno la camarera lo agitó, y yo que soy tan empirista lo tuve que agitar también. Habían unos abrigos en la barra que retiré por si las moscas antes, porque era consciente del tintorro que llevaba, pero aún así no fue suficiente la precaución, pues mi ansia empirista no se cercioró de si la botellita estaba cerrada, y salió medio zumo despedido sobre esos abrigos justamente, no sé por qué la gravedad elige tan bien hacía donde desviarse, pero jode. Yo pensé rápida si os preguntais por mí, me fuí corriendo con lo que me quedaba de zumo tras sacudir un poco la superficie de los abrigos que nadaban en piña, no sea que me vieran y todavía acabara la noche con un tortazo por lista.... Una de esas noches completitas.

Os quiero lectores de blogs, por ayudar a limpiar conciencias!!!!